Blog

Las enfermedades profesionales siguen siendo uno de los mayores desafíos para la gestión de la seguridad y salud en el trabajo. Se desarrollan como consecuencia directa de la exposición prolongada a agentes físicos, químicos, biológicos o psicosociales presentes en el entorno laboral. A diferencia de un accidente, estas patologías se construyen en silencio y, según la OIT, causan seis veces más muertes que los accidentes de trabajo.
Comprenderlas, clasificarlas y prevenirlas es clave para construir ambientes laborales seguros, sostenibles y productivos.

¿Qué son las enfermedades profesionales?

Una enfermedad profesional es un estado patológico adquirido como resultado de la ejecución de una actividad laboral o por la exposición a condiciones propias del entorno de trabajo.
De acuerdo con la OMS, estas enfermedades pueden estar asociadas a agentes físicos (ruido, vibración), químicos (solventes, metales), biológicos (virus, bacterias), e incluso factores sociales o emocionales (estrés crónico, cargas laborales excesivas).

Estas patologías son prevenibles mediante protocolos adecuados de seguridad, higiene industrial, ergonomía y capacitación continua.

Clasificación de las enfermedades profesionales

Las enfermedades profesionales se agrupan comúnmente en seis categorías:

Grupo 1 – Agentes químicos

Sustancias tóxicas, irritantes o sensibilizantes presentes en procesos industriales, limpieza, manufactura o laboratorios.

Grupo 2 – Agentes físicos

Ruido, vibración, radiaciones, temperaturas extremas o presión atmosférica.

Grupo 3 – Agentes biológicos

Exposición a bacterias, virus, hongos o parásitos, común en áreas de salud, agricultura o manejo de animales.

Grupo 4 – Inhalación de sustancias nocivas

Polvos minerales, fibras, vapores o gases no incluidos en los grupos anteriores.

Grupo 5 – Enfermedades dermatológicas

Lesiones cutáneas vinculadas al contacto permanente con sustancias irritantes o alérgicas.

Grupo 6 – Agentes carcinogénicos

Sustancias o exposiciones capaces de generar cáncer ocupacional (como el amianto).

Además, pueden clasificarse según vía de entrada al organismo: contacto, inhalación, ingestión o picadura.

Ejemplos frecuentes de enfermedades profesionales

• Asma bronquial laboral: causada por exposición a agentes químicos o biológicos.
• Cáncer ocupacional: como cáncer de pulmón o mesotelioma asociado al amianto.
• Dermatitis ocupacional: irritativa o alérgica por contacto con químicos.
• Trastornos musculoesqueléticos: lumbalgias, tendinopatías, hernias discales.
• Lesiones por esfuerzo repetitivo: como síndrome del túnel carpiano.

Enfermedades profesionales según tipo de trabajo

Construcción

Silicosis, asbestosis, quemaduras, cáncer de piel y enfermedades respiratorias por partículas.

Industria agropecuaria

Brucelosis, carbunco, ántrax, tuberculosis y enfermedades por polvo orgánico (bisinosis, pulmón de cangrejo).

Almacenes, mecánica y automoción

Lumbalgias, lesiones del manguito rotador, hernia discal y desgarros musculares.

Sector salud, bancario, administrativo y docencia

Estrés laboral, migrañas, depresión, fatiga visual, síndrome del túnel carpiano.

Cosmetología y limpieza

Dermatitis, urticaria, vitíligo profesional, asma y bronquitis por productos químicos.

Medidas de control y prevención

La prevención de enfermedades profesionales requiere un enfoque sistemático basado en gestión de riesgos:

1. Identificación de riesgos y peligros

Analizar el entorno laboral para detectar las exposiciones que podrían generar una enfermedad.

2. Eliminación o minimización de riesgos

Implementar medidas técnicas y administrativas para reducir o eliminar los riesgos identificados.

3. Capacitación permanente

Educar a trabajadores y supervisores sobre riesgos específicos y formas de prevenirlos.

4. Uso adecuado de Equipos de Protección Personal (EPP)

Cuando los riesgos no pueden eliminarse, los EPP se convierten en una barrera esencial.

5. Monitoreo y control continuo

Verificar periódicamente la efectividad de las medidas adoptadas y realizar ajustes cuando sea necesario.

Las enfermedades profesionales representan un desafío que exige responsabilidad, prevención y una cultura organizacional comprometida con la seguridad. Implementar controles adecuados, capacitar al personal y evaluar constantemente los riesgos es esencial para reducir su incidencia.
Cuidar la salud de los trabajadores no es solo una obligación legal, sino una estrategia clave para construir ambientes laborales seguros, productivos y sostenibles.

En ExproAsesorías apoyamos a las organizaciones en la identificación, prevención y gestión de riesgos laborales, fortaleciendo entornos de trabajo seguros y sostenibles. Si tu empresa necesita acompañamiento experto en seguridad y salud ocupacional, estamos listos para ayudarte.